LOS YEAH YEAH YEAHS REGRESAN

Es evidente que los Yeah Yeah Yeahs se han consolidado como uno de los grupos favoritos del momento. Con Karen O que es una de las mejores front girls del momento (y me atrevería a decir que de la historia del rock) ya que tiene la habilidad de parecer un ángel, pero arriba del escenario es un demonio, tendiendo el don de transmitir una energía inigualable.

Este grupo de la camada neuyorkina (nada más hay recordar a los volvieron a poner en escena al rock dejando atrás la música electrónica: Los Strokes) tiene dos discos en su haber: Fever to Tell y Show Your Bones, el primero es una muestra clara de sonido crudo y visceral de un grupo con una actitud punk, el segundo (tal como lo muestra el primer sencillo Turn Into) es una sonido más mesurado, tal vez aprovechando el éxito de la bella baladita del primer disco titulada Maps. A algunos críticos se desilusionaron de esta segunda producción debido a la pérdida de la visceralidad y la frescura, y es cierto, sin embargo, es un muy buen disco nada más que con un estilo diferente.

El concierto de ayer me quedó a deber, si bien ahora no se presentaron en un espacio tan íntimo como lo fue el Salón 21, no debería juzgarlo de acuerdo a eso, no obstante, la vez pasada fue un mejor concierto, ya que la energía demostrada en el escenario fue mayor y el sonido ni que se diga.

Pero a pesar de todo no puedo decir que fue un mal concierto, la gente estaba muy emocionada e interpretó canciones tanto del primero como segundo disco con mucha emotividad, la baladita de Maps fue muy pero muy sentimental. Por extraño que parezca, la empresa que se encargó de traerlos no se encargó de atiborrar la explanada del Palacio de los Deportes, lo cual hizo que se les pudiera apreciar mejor.